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California Los conductores que se ponen al volante de un coche cuando están somnolientos pueden ser tan perjudiciales como los conductores ebrios. Los accidentes que provocan tienen las mismas probabilidades de ser mortales. Este problema no recibe tanta atención como la epidemia de conductores ebrios, aunque los peligros pueden ser los mismos.
Mucha gente no sabe que conducir un coche sin dormir durante 20 horas o más es lo mismo que conducir con una tasa de alcoholemia de 0,08 en sangre. Las colisiones pueden ser igual de mortales, ya que los conductores no son capaces de hacer nada para evitar un accidente cuando están somnolientos. En 2015, más de 5.000 personas murieron en accidentes causados por conducir con sueño.
Conducir fatigado impide a los conductores utilizar sus reflejos para evitar accidentes. Son menos capaces de percibir los peligros y sus tiempos de reacción disminuyen, si es que son capaces de reaccionar. En este sentido, existen algunas ayudas en camino, como las tecnologías de vehículos que alertan a los conductores cuando están derrapando y que pueden tomar el control del coche. Sin embargo, estas tecnologías no sustituyen al buen juicio de los conductores, que sólo se ponen al volante cuando han dormido lo suficiente.
Los que han sido herido en accidente con un conductor que conducía un coche mientras estaba somnoliento puede tener recursos civiles contra el conductor que causó el accidente. El automovilista responsable de un accidente puede ser obligado a pagar económicamente por su negligencia. Las personas que hayan sufrido lesiones en estos accidentes de tráfico deben ponerse en contacto con un abogado especializado en lesiones personales para conocer sus opciones legales y el proceso que tendrían que seguir para recibir una indemnización por sus lesiones.