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A casi todo el mundo le gustan los perros. Les demostramos nuestro amor compartiendo bonitos vídeos de perros en nuestras páginas de Facebook o siguiendo a mascotas famosas en Instagram. La mayoría de los amantes de los perros también tienen perros y los quieren como si fueran sus hijos.
Sin embargo, siempre existe la posibilidad de que nuestros amigos peludos favoritos recurran a un mordisco. Pero, ¿por qué iba a morderte un perro, sobre todo en una situación amistosa?
Es muy poco probable que un perro muerda a una persona espontáneamente; normalmente, hay una razón detrás de la acción. Algunas de las causas más comunes incluyen:
Sea cual sea el motivo, las mordeduras de animales siguen ocurriendo. Por suerte, conocer las razones ayuda a las personas a evitar amenazar a los perros accidentalmente y ser mordidos.
Por ejemplo, pida permiso al dueño del animal antes de acercarse. El dueño conoce el comportamiento de su mascota con los extraños. Si su hijo quiere acercarse al animal, enséñele a pedir permiso y a dejar que el perro se acerque a él. Así aumentan las posibilidades de un encuentro amistoso.
Analiza también el lenguaje corporal del perro, igual que harías con una persona nueva. Si se encorvan, enseñan los dientes o ladran, no es seguro acariciar a ese perro en concreto. Repita este punto a sus hijos para evitar incidentes.
Sin embargo, un perro puede morderle aunque tome las medidas adecuadas. Si te muerde a ti o a un ser querido, recaba los datos del dueño y limpia inmediatamente la herida con agua y jabón. Después, póngase en contacto con un profesional sanitario para ver si necesita alguna vacuna o tratamiento de seguimiento.
Si tiene costosas facturas médicas o salarios perdidos debido a la lesión, considere la posibilidad de emprender acciones contra el propietario del perro. Según la ley California, los propietarios son estrictamente responsables de las lesiones por mordedura. Pero necesitará los datos del propietario y pruebas de la mordedura del animal.